Hoy también ha habido sendero.
La verdad es que, después de la última caminata, tenía toda la impresión que la ruta de hoy iba a ser bastante floja, aburrida y nada destacable; el sábado pasado se quedó el listón muuuuy alto.
Yuma y yo nos hemos dirigido hasta la población de Onil, hemos tomado la carretera que lleva hasta la Ermita de Santa Ana y al final de la misma, en un cruce de caminos, un lugar que parece lleva el nombre de L'Arcaeta, hemos dejado el coche.
En ese lugar comienza nuestro sendero.
Empezamos caminando por la Rambla de Arcá.
Lo cierto es que tenía la corazonada de que iba a ser un auténtico secarral pero... me ha sorprendido la frondosidad de la zona.
La Rambla de Arcá nos lleva al Barranco de Taguenca, un lugar con algún que otro campo de cultivo y salpicado por algunas casonas.
Ruta bastante fácil, a través de senderos cuajados de pinos, con marcas evidentes del paso de los bikers, incluso, a pesar de la hora, el calor y el día de la semana, Yuma y yo nos hemos cruzado con alguno.
Bonitas vistas de estas sierras que se encuentran a mitad de camino entre la Sierra de Onil y la del Menejador.
El regreso ha sido atravesando el Barranco de Monvarí.
Desde allí, espléndidas imágenes del Maigmó y El Despeñador.
También en este barranco hay campos de cultivo y casas de labranza.
Se agradece la sombra y el frescor que ofrecen estas pinadas, aunque hoy el calor no ha sido tan sofocante como en días anteriores.
De nuevo por la vía pecuaria de la Rambla de Arcá para llegar hasta el coche.
Han sido poco más de 7 kilómetros, muy sencillos y menos decepcionantes de lo que me imaginaba. No ha estado mal del todo y... Yuma, como siempre, se lo ha pasado en grande.
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Valoración: 3***
Valoración: 3***
Recomendable: Sí, claro. Es tan fácil que se puede hacer en plan familiar, incluso te puedes llevar la mascota (el perro, el gato, el canario, etc...)